Mezclado, no agitado

 

Amigas y amigos, hoy estrenan la última (de momento) película de James Bond: “Spectre”.

 

 

 

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Amigas y amigos, hoy estrenan la última (de momento) película de James Bond: “Spectre”.

Bond, James Bond. El espía perfecto. Listo, gran tirador, duro, con nervios de acero y seductor irresistible. También machista (más en sus inicios que en tiempos recientes), chulo y prepotente y violento, siempre violento. Un personaje nacido, en parte, de las experiencias de Ian Fleming durante el tiempo en el que trabajó para el “Ministerio de Guerra No Caballerosa” (del que ya os hablamos cuando lamentábamos la muerte de Christopher Lee) durante la Segunda Guerra Mundial.

El personaje ha sido interpretado por seis actores (sin contar David Niven en el Casino Royale original, que era más bien una comedia surrealista). Una popular teoría fan sostiene que en realidad el nombre James Bond es un alias que se van pasando entre diferentes agentes cuando se retiran. Así, el Bond de Georges Lazenby dejó el servicio secreto tras la muerte de su esposa, mientras que el de Timothy Dalton fue retirado del servicio por exceso de brutalidad. Del Bond de Sean Connery, se especula que pudo ser capturado por los estadounidenses y encerrado en Alcatraz, de donde consiguió escapar. Las películas de Daniel Craig son un reboot de la saga, con lo que está por ver si las siguientes películas (Craig ha anunciado que Spectre será la última que haga) resucitan esta teoría para los nuevos tiempos.

A Bond, aparte de por su nombre, lo llaman por su número código: el 007. Pero además, Bond tiene una serie de cosas que le identifican allá donde va, como su arma preferida, la pistola Walther PPK, los gadgets que le fabrican en los laboratorios del MI6 o su bebida favorita: el Martini con vodka, mezclado, no agitado. Si queréis beber lo mismo que el bueno de James, acordaos de llevar la camiseta de hoy al bar y decirle al camarero como queréis exactamente que prepare vuestra copa.

Y ahora damas y caballeros, vamos a rematar este artículo con algo de clase. Todo el mundo en pie para recibir a la Dama Shirley Bassey (lo de “Dama” no lo digo yo, lo dice la Reina de Inglaterra). Si es la persona que más veces ha cantado el tema principal de una película de James Bond, será por algo: