martes, 17 de febrero de 2015

¡Precaución, amigo conductooooor!



Para los que llevamos una vida tranquila, posiblemente esta imagen desata lo más salvaje que llevamos dentro...




Para los que llevamos una vida tranquila, posiblemente esta imagen desata lo más salvaje que llevamos dentro...
Y es que a los que conducimos y/o los que vamos con conductores a veces nos surge esta imagen y ¿qué haces?
Momentáneamente te conviertes en un experto físico/matemático y calculas de tal manera que si te viese tu profesor de mates lloraría.

Según la velocidad que lleves puede pasar que:

  • Vayas demasiado rápido y decidas que no te da tiempo a detenerte. Así que te conviertes en un experto piloto de carreras, agudizas todos tus sentidos y aceleras esperando que el semáforo no se ponga en rojo, porque como te vea un poli o haya cámaras, la cagaste Burt Lancaster.
  • Puedes ser que vayas rapidillo y seas un caguetilla. ¡NO FRENES! Es mejor una multa que liarla muy parda.
  • Si vas lento, para. Te vas a comer el semáforo, pero la vida del conductor te obliga a perder parte de tu existencia en tiempos muertos como éste.
  • Si eres de los atrevidos, ¡no se te ocurra acelerar! Seguro que te lo pasas en rojo y, puede que no te pillen ni pase nada, pero puede que te multen o peor, ¡que no lo cuentes!
La mayoría, por eso, ¡aceptamos el reto! Challenge accepted, frase popularizada por Barney Stinson de "Cómo conocí a vuestra madre".


Que por cierto, una cosa lleva a la otra y ¿sabéis quien es el doblador de Barney? Miguel Angel Garzón. ¿Y quién es ese? ¡Pues Quique de "Farmacia de guardia"!

Los de Yo fui a EGB nos lo explican:


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